

El gobernador AXEL KICILLOF sorprendió al anunciar el desdoblamiento de las elecciones en la provincia de Buenos Aires y convocarlas para el próximo 7 de septiembre, decisión que generó un fuerte impacto político inmediato: el presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, ALEXIS GUERRERA, anunció que la sesión prevista para este martes quedaba sin efecto.
La medida trastocó por completo la estrategia del oficialismo legislativo. En una jugada de tinte bilardista, los bloques referenciados en el kirchnerismo y el massismo habían acordado una maniobra parlamentaria para suspender las PASO sin necesidad de conseguir los dos tercios requeridos por el reglamento. En la última sesión se había ingresado el proyecto del diputado Rubén Eslaiman, sin despacho favorable de comisión, lo que les permitía tratarlo mañana con apenas 47 diputados presentes para el quórum y mayoría simple para aprobarlo. Sin embargo, la jugada quedó completamente desactivada tras el anuncio de Kicillof.
Ahora, el nuevo escenario pone el foco en el Senado bonaerense, presidido por la vicegobernadora VERÓNICA MAGARIO, ya que será esa Cámara la encargada de recibir el nuevo proyecto de ley del Ejecutivo para suspender las elecciones primarias. Aún no se confirmó la fecha de la próxima sesión, pero en el entorno del gobernador aseguran que la convocatoria será inminente. “Kicillof quiere las PASO suspendidas cuanto antes”, afirman.
El anuncio también reavivó las tensiones internas dentro del oficialismo provincial. Mientras el kicillofismo busca justificar la decisión con argumentos logísticos —“Milei nos metió en un quilombo con la boleta única. Si vamos con dos sistemas distintos son 30 horas de jornada electoral. Un caos. Dos urnas, dos sistemas distintos y los mismos recursos. Imposible por donde se lo mire”, explican cerca del mandatario—, desde el cristinismo hay fuerte resistencia.
“No podemos rifar recursos y desgastarnos en dos elecciones diferentes como quiere Axel. Hay que poner todo en un solo día y empezar a recuperar el país y cada ciudad que está en manos libertarias”, retrucan desde los sectores leales a Cristina Kirchner, quien suena como posible candidata a diputada provincial por la Tercera Sección Electoral.
Hasta antes del anuncio del gobernador, ambas vertientes del peronismo coincidían en una jugada institucional sin precedentes: modificar el proyecto de suspensión de las PASO durante la sesión, incorporando un artículo clave que le quitaría al gobernador la potestad exclusiva de fijar la fecha de los comicios, transfiriendo esa atribución a la Legislatura. “Es un golpe legislativo nunca visto”, se sinceró un asesor peronista con experiencia en el Ejecutivo.
El tablero político quedó reconfigurado y el desdoblamiento ya es un hecho. El nuevo desafío será lograr consensos en el Senado, mientras el oficialismo define si avanza o no con la suspensión de las primarias en una provincia donde el arrastre electoral suele ser determinante.