martes 03 de diciembre de 2024 - Edición Nº2190

Otros | 15 nov 2024

Cultura

Los Premios a la Cultura “Arturo Jauretche”2024 y el clamor por lo colectivo

Creado con el objeto de festejar el pensamiento crítico, nacional y popular, la entrega de la estatuilla se convirtió en una oportunidad para el encuentro de luchadores por la cultura local.


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Se celebró la 21ª Edición de Premios a la Cultura “Arturo Jauretche” 2024, organizada por el Instituto Superior de Investigación en Ciencias Sociales –que lleva el mismo nombre- de la Ciudad de Merlo, Provincia de Buenos Aires. Con palabras de bienvenida a cargo de su director, Lic. Marco Aurelio Roselli, el encuentro se realizó a sala llena, el 13 de noviembre, en el Auditorio de la Casa de la Provincia de Buenos Aires, de Avenida Callao 237, en CABA.

Este galardón tiene la misión de reconocer a todas “aquellas personas cuyo desempeño fue importante en la lucha por la construcción de un pensamiento nacional, popular y democrático”, así lo expresa el programa del evento, a la vez que preanuncia los nombres y rubros de quienes este año fueron distinguidos con la estatuilla; que van desde la labor docente, artística, periodística y militante hasta, incluso, la labor de defensa del patrimonio nacional. Los convocados fueron Ariel Scher; José Tcherkaski; Aldo Leiva; Mariana Arruti; Diego Brancatelli; Luisa Kuliok, la Asociación Pilotos de Líneas Aéreas; Yamila Cafrune, Juan Martín Ramos Padilla y Cristina Álvarez Rodríguez.   

El evento, desde luego, no pretendió escindirse del contexto social y político que la actualidad revela para meramente entregar una pieza de bronce. De modo que contó con discursos generosos, fervorosos y encendidos, marcados por un denominador común o casi un clamor: el rescate de “lo colectivo”, como herramienta de reconstrucción de nuestra historia social y nuestro acontecer. 

En ese sentido José Tcherkaski, uno de los primeros en subir al escenario, recordó la famosa frase de la obra Mahagonny-Songspiel de Bertolt Brecht: “Las noticias son malas” ("Die schlechte Nachricht") y completó la idea proponiendo que nuestra tarea es hacer “que las noticias dejen de ser malas para que sean, simplemente, noticias”.

También Luisa Kuliok, en su discurso, afirmó que: “La Patria es una memoria, individual y colectiva… veo en la platea a mi familia, a mis amigos entrañables, comprometidos con la comunidad y veo a los que no están… veo a los desaparecidos y a las desaparecidas… Y, yo creo, que un premio como este, tan sensible, me crea una responsabilidad. Hay un hilo que se ha roto y debemos apelar a la imaginación, al pensamiento y al coraje para rehilar ese hilo infinito”. Dicho esto, interpretó seguidamente el poema de Juan Gelman, Viendo a la gente andar. Sobre el final de su recitado, el auditorio estalló en una ovación rotunda y también algunas lágrimas de emoción.

El encuentro iba llegando a su fin luego de las aplaudidas exposiciones de Yamila Cafrune, quien recibió la estatuilla por su labor musical e interpretativa y a Diego Brancatelli, reconocido por su labor radial, entre otros, Sin embargo, cuando desde el escenario llamaron a la Asociación Pilotos de Líneas Aéreas por su labor de defensa del patrimonio nacional, el auditorio hizo especial silencio, cuando su representante se refirió al momento actual, de la siguiente manera.

“Estamos ante una fuerza de ocupación en nuestra propia Nación, y en tiempos de oscuridad no nos queda otra alternativa más que intentar arrojar un poco de luz… quiero aclararles que ellos no tienen más que sus mezquinos intereses, pero nosotros tenemos un inmenso amor por el pueblo de la nación argentina, por nuestros recursos, por nuestros mares, por nuestros cielos, por nuestras montañas, por nuestro suelo. Así es que vamos a renacer más fuertes, mejores, más solidarios, pero debemos decir que esto sucedió por culpa nuestra y si no lo revertimos van a seguir haciendo daño”.

Y agregó: “Don Arturo decía que los hechos unen y que las abstracciones dividen. Ante el imperativo de la adversidad, las diferencias ideológicas pierden sustento por la necesidad de soluciones en los pueblos. No podemos permitir que ´gaseen´ a nuestros viejos, que nos quiten el futuro de nuestros hijos, que esta fuerza de ocupación nos quite el espíritu de pertenencia”.

“Es necesario para los argentinos amarnos los unos a los otros (...) y tenemos una obligación moral que es soñar con un mundo mejor y llevarlo adelante (…) Agradezco al Instituto Superior Dr. Arturo Jauretche por seguir siendo un faro de referencia para quienes luchamos para ello”. Y, de esa manera, concluyó el encuentro.

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