

El próximo jueves 24 de octubre se estrena Lo que quisimos ser, la nueva película del cineasta Alejandro Agresti, quien nos regaló grandes títulos como El viento se llevó lo que y Valentín. En una charla con Data BA el director nos abrió las puertas de su proceso creativo y nos permitió conocer de cerca cómo surgió la idea de esta conmovedora historia de amor.
Al preguntarle cómo fue que surgió la idea detrás de Lo que quisimos ser, Agresti confesó que el proyecto nació de un interés particular por crear una historia de amor única. “Lo particular no crece en los árboles, hay que pensarlo”, dijo. Para Agresti, una de las claves fue la reflexión sobre la era digital y el impacto que las redes sociales tienen en la forma en que las personas se presentan. “Hoy la gente se comunica más por redes, se conoce, pero se cuenta cualquier cosa. Es muy difícil que cuentes realmente lo que sos; dicen lo que hubieran querido ser.”
Esta reflexión lo llevó a situar la trama de la película en una época previa a la explosión de las redes sociales: entre 1998 y 1999. Así, la historia se centra en una pareja que, cara a cara, se miente sobre quienes son, explorando el germen de las "vidas inventadas" que hoy vemos en internet. “¿Qué pasaría si esa mentira pactada se hubiera producido en la vida real y cara a cara en aquel tiempo?”, reflexionó el director sobre el eje central del guion.
Una dupla protagonista muy especial
En cuanto a los personajes principales, Agresti reveló que no fue un proceso inmediato llegar a ellos. Aunque el nombre de Eleonora Wexler como protagonista femenina fue una elección clara desde el principio, la búsqueda del actor para el personaje masculino, Luis Rubio, fue más complicada.
Agresti compartió que, aunque en un principio tenía dudas, la elección final lo sorprendió gratamente. “Veía cosas de él, aunque fueran de personajes cómicos, y pensaba: ‘Este tipo tiene algo especial’”, relató sobre su selección. “Él me decía: ‘Hago trabajos cómicos, ¿cómo voy a conmoverme y llorar?’ Yo le decía, vas a ver que va a salir”, contó Agresti, destacando la tensión y la emoción que impregnó el rodaje.
Una Buenos Aires que late en cada escena
Otro de los sellos característicos de Lo que quisimos ser es su ambientación en Buenos Aires, una ciudad que para Agresti tiene un significado muy personal. Luego de haber vivido y trabajado en el exterior por varios años, el director asegura que regresar a filmar a su ciudad natal le genera una profunda emoción. “Si estás todos los días viviendo en la ciudad, no sé si la rescatás tanto, pero todo lo que extrañás se potencia mucho más”, afirmó.
Con escenarios porteños que van desde bares hasta calles llenas de vida, la película es, en palabras de Agresti, una carta de amor a la ciudad. Y esa simplicidad que elige para sus locaciones también se refleja en la propuesta visual de la película: “Quería hacer una película simple, donde los rostros fueran paisajes”, agregó, destacando la sutileza y profundidad emocional que los actores lograron transmitir en cada primer plano.
¿Por qué ver Lo que quisimos ser?
Para cerrar, Agresti invita al público a sumergirse en esta historia de amor única, que a pesar de estar ambientada en el pasado, nos hace reflexionar sobre las dinámicas actuales de las relaciones en la era digital. “Es una historia de amor simple, pero profunda, que nos recuerda el valor de la conexión genuina, más allá de las pantallas”, concluyó.
No te pierdas Lo que quisimos ser, en cines a partir del 24 de octubre.