

En el primer día hábil tras el fin de semana extralargo por Semana Santa y el Día del Veterano y los caídos en la Guerra de Malvinas, se espera una jornada de tensión ante la protesta nacional impulsada por la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) en rechazo a los más de 11.000 despidos en la administración nacional. La medida inluye, además de un paro nacional, un ingreso masivo a distintas oficianas públicas.
El secretario general del gremio, Rodolfo Aguiar, ratificó la medida en las últimas horas con una publicación en la red social X: “El Presidente se ha decidido a quebrantar el sistema jurídico argentino en su parte medular y tanto él como sus funcionarios podrían terminar presos”, alertó Aguiar. Según el recuento realizado el fin de semana por el gremio, los despidos ascienden a 11.000 en toda la administración pública, un número que se aproxima a los 15.000 que el Presidente Milei aseguró haber alcanzado durante su gestión.
“Provocar cesantías masivas en el Estado es suprimir derechos fundamentales de las personas y esa es una conducta tipificada en nuestro Código Penal”, argumentó Aguiar.
Luego prosiguió: “Vulnerar la garantía de estabilidad prevista en el artículo 14 bis de la Constitución Nacional decenas de miles de veces a su vez provoca la supresión de otros derechos fundamentales que tiene toda la sociedad. Y nuestro Código Penal en su artículo 226 da penas de entre 5 y 15 años a quienes impidan el libre ejercicio de las facultades constitucionales”.