El gobernador Axel Kicillof realizó su discurso de apertura de sesiones de la Provincia con un claro mensaje en contra de las políticas del presidente Javier Milei y una posición clara respecto del Pacto de Mayo al que convocó el mandatario nacional. “Nuestro pacto es con el pueblo, nuestro pacto es con la patria y nunca lo vamos a traicionar”, expresó.

Pasadas las 17 horas Kicillof comenzó su discurso que tuvo dos ejes centrales, el repaso de lo hecho en los 4 años de gestión y una explicación de las consecuencias de las políticas del gobierno nacional y cómo afecta eso a la provincia en la actualidad y de cara a lo que viene. También se pronunció “en contra del cierre de Télam”, recordó a “los 30 mil detenidos desaparecidos” y pidió la reactivación de la obra pública.

En ese contexto, cerca del cierre hizo alusión al Pacto de Mayo convocado por Milei en su discurso de apertura y fue claro: “Nuestro pacto es con el Pueblo, nuestro pacto es con la Patria y nunca lo vamos a traicionar. En sus primeros 90 días ha quedado en evidencia que este gobierno nacional promueve la degradación, la desintegración y la descomposición. Lo que está en peligro es la unidad nacional: así como se propone desintegrar la sociedad promoviendo el egoísmo, también se está poniendo en riesgo la unidad nacional. No queremos ser Irlanda, queremos seguir siendo Argentina”.

Además, aseguró que “la provincia promoverá cada vez una mayor cooperación con otros gobiernos provinciales” y que los gobernadores están “muy preocupados por el nulo sentido federal que muestra el Gobierno Nacional”.

“Estamos decididos a integrar esfuerzos para actuar como red y como límite al delirio centralista del presidente. ¿Qué significa poner un límite? Nuestra aspiración es clara: Que ponga los pies sobre la realidad y que gobierne con respeto y dentro de la Constitución. Después de someter al pueblo, a la democracia y al federalismo a una agresión tan inédita como salvaje, ahora se nos lanza una invitación que se parece más a una amenaza o una imposición que a un diálogo. Ofrece exactamente lo que dice rechazar como método de la política: aprueben las leyes y recibirán los recursos que ilegalmente se cortaron”, enfatizó.

Y remarcó: “Nuestra respuesta es muy clara: cuenten con nosotros para reuniones de trabajo, para encuentros destinados a solucionar problemas, incluso para debatir. Pero si se trata de encuentros para fotos y marketing arranquen nomás si no llegamos”.

“Estaremos en todos los ámbitos que sean necesarios para seguir reclamando con firmeza algunos puntos concretos con los que todas las fuerzas políticas y los 135 intendentes seguramente coincidirán: La inmediata reactivación de las obras públicas frenadas caprichosamente que afectan la vida de los municipios; el respeto al federalismo y la inmediata reposición de los fondos vengativamente birlados a las provincias; la devolución de los fondos del FONID para los salarios docentes y los fondos para las universidades y el transporte», señaló.

También añadió «la urgente distribución de los recursos destinados a los comedores y los medicamentos que se interrumpieron de manera tan insensible como incomprensible; la derogación del DNU ilegal y anticonstitucional; el firme rechazo al delirante proyecto de dolarización; y el dragado del Canal Magdalena y la defensa irrestricta de nuestra patria y nuestra historia, con el firme reclamo por la soberanía en Malvinas”.

Kicillof también hizo un repaso de realizado en su primera gestión “pese a la tierra arrasada que era la provincia y la pandemia” y puso el foco en “las 221 escuelas construidas”, las computadoras entregadas, los viajes de egresados, los patrulleros nuevos, la escuela de policía rural, “los 5000 nuevos policías”, las más de 21 mil viviendas entregadas, los operativos de vacunación, asfaltos y la cuenta DNI cómo la “principal billetera virtual del país” entre otras cuestiones.

“Nada de eso lo hace el privado, la mano invisible del estado, esto lo hizo el estado, lo que él (Milei) llama organización criminal. Criminal es desmantelar esas política, parar las obras, interrumpir de un día para el otro la transferencia de recursos. Esperábamos concretar transformaciones más profundas, a eso nos comprometimos, pero en menos de 90 días la situación cambió drásticamente”, señaló.

En esa línea enumeró varias medidas del gobierno nacional cómo la desregulación de precios, la paralización de obras, la caída del salario mínimo “que es el segundo más bajo de la región”, la caída de ventas y la fuerte inflación de los últimos meses. Aseguró que “la próxima desgracia que llega inexorablemente es la recesión”.

“Hasta los próceres que tiene Milei cómo Roca entendía que se necesita obra pública o Alberdi la educación pública”, afirmó y exclamó que “la paralización de la obra pública pone en riesgo 500 mil empleos formales”.

“Hay 900 obras del gobierno nacional en la Provincia. Le decimos al presidente que el trabajo, el desarrollo y la dignidad que estas obras construyen no se puede frenar y exigimos que las obras se tienen que reiniciar de manera urgente. No es un ajuste a las cajas, es a la sociedad en su conjunto”, enfatizó.

Ya para cerrar, resaltó: “Nos pueden atacar, nos pueden injuriar, pueden mentir, pueden sacar los tanques a las redes. Nosotros vamos a seguir recorriendo todos los pueblos y seguir trabajando incansablemente para sostener y ampliar los derechos y por la justicia social. Lo que no pueden robarle a la Provincia de Buenos Aires es su Derecho al Futuro. ¡Viva la Argentina, Viva la Provincia de Buenos Aires!”.

Además de legisladores, el gabinete provincial y ex funcionarios, dieron el presente algunos intendentes de la región como Mayra Mendoza (Quilmes), Mariano Cascallares (Almirante Brown), Federico Otermín (Lomas de Zamora), Julián Álvarez (Lanús) Jorge Ferraresi (Avellaneda) y Andrés Watson (Florencio Varela).