Aunque los rumores sugerían que podría ser en Huracán, La Renga anunció para Racing su vuelta al área AMBA después de la tripleta en el Único Diego Maradona de La Plata en otoño del 2022. Será el sábado 6 y el martes 9 de enero. 

La banda había hecho seis shows en Huracán en 2017, hasta ahora última presencia en la ciudad de Buenos Aires. Para septiembre del año pasado se anunciaron dos conciertos en Tecnópolis, al otro lado de la General Paz, pero finalmente el municipio de Vicente López decidió no conceder los servicios necesarios para que se concretara la habilitación. 

La Renga, que es capaz de tocar en lugares enormes de todo el país, no logra las autorizaciones para hacerlo en Capital. Desde la vuelta de las cuarentenas, llevó lo suyo a autódromos de Salta, Córdoba y San Luis, a canchas como las de Newell's en Rosario o la de Huracán en Corrientes, al coqueto Movistar Arena de Chile y a un hangar del viejo aeropuerto de Ushuaia. A un camping de Baradero y a un predio municipal de Maldonado, Uruguay. También a Florida, Londres, Barcelona y la Costa del Sol. 

Impedido en CABA, el grupo encuentra su aproximación vía Avellaneda, en la otra orilla del Riachuelo. La saga en Racing significará el debut del grupo en el estadio en el que Los Redondos presentaron "Último bondi a Finisterre" en 1998. 

Un año antes de aquello, La Renga había hecho la que hasta enero será su última presencia en el conurbano: 5 y 6 de septiembre de 1997 en el polideportivo de Argentino de Quilmes. A pesar de plantear dos conciertos, la demanda superó a la oferta y eso marcó un standard de la convocatoria que estaba alcanzando la banda. Algo que quedó ratificado tres meses después, cuando La Renga hace en la cancha de Atlanta el primer show de su historia en un estadio de fútbol. 

De allí en más, el grupo iniciaría su escalada definitiva a hacia la masividad y sería necesario entonces encontrar aforos con mayores capacidades. Así aparecerían Huracán, Vélez y River, los tres estadios más grandes de Capital. Y medidas incluso mayores como las de campings, predios feriales, hipódromos, aeródromos y autódromos.     

Esa nueva dinámica dificultaba volver al Gran Buenos Aires. Hasta que apareció Avellaneda como un territorio amigable para retornar al área AMBA en una coordenada favorable: en el corazón del conurbano, cerca de CABA y conectada vía Autopista a otros nodos. Llega, entonces, la posibilidad de un nuevo banquete en el conglomerado que reúne a un tercio de todos los habitantes de este país.